El fenómeno que en redes sociales de Luimelia, la pareja formada por Luisita (Paula Usero) y Amelia (Carol Rovira) durante la séptima y octava temporada de uno de los seriales más populares de la televisión española, ‘Amar es para siempre‘ (2013 – Actualidad), ha creado un auténtico círculo virtuoso. Tal ha sido la ola de apoyo del romance de estos dos personajes, que los productores decidieron hacer algo que nunca había pasado en la ficción: un spin-off. Ni siquiera en su época en TVE cuando era ‘Amar en tiempos revueltos’ (2005 – 2012), en la que hubo TV-movies y libros para expandir el universo de la telenovela, hubo un spin-off.
Ya la primera temporada de ‘#Luimelia‘ se salía de lo previsto, llevando a la pareja desde la España de 1977 hasta la de 2020. Esa ruptura fue interesante, puesto que el resto de personajes relacionados con ellas también eran trasladados a la actualidad. Ver a María (Lucía Martín) e Ignacio (Jonás Berami), la “superpareja” predecesora de Luimelia, convertidos en consejeros de las protagonistas y en auténticos modernos, sorprendía. Por otro lado, uno de los aspectos que más atraía de los seis primeros capítulos del spin-off era que rompía con la cuarta pared, como también introducía temas actuales, como los estereotipos que tiene el colectivo LGBT o el feminismo.
Con una primera temporada similar a la primavera, el primer episodio de la segunda temporada apuesta por una línea continuista, en la transición del verano al otoño. No obstante, se nota que las dos protagonistas no son ya las mismas. Los mitos del amor y la pasión están derrumbándose, ambas se encuentran en otro momento como pareja. Pese a tener alma de webserie (los capítulos seguirán durando 10 minutos), queda muy bien canalizada la trama en ese lapso de tiempo. La introducción ya apunta a que habrá mucha comedia, los secundarios tendrán mayor protagonismo y, sobre todo, se ahondará en ese período de la pareja en la que se la acepta tal como es, con sus virtudes y sus defectos.
Una segunda temporada que expande el universo ‘Luimelia’
Solo por eso, ‘#Luimelia’ merece un sonoro aplauso, pocas veces se ha visto en ficción ahondar en los problemas más cotidianos de las parejas, cuando están consolidándose o ya están consolidadas. Ambas se conocen y saben qué quieren. Esa faceta, ya en parejas heterosexuales, era complicada de ver en televisión y en clave LGBT era casi una quimera. Sin embargo, ‘#Luimelia’ da un paso adelante y demuestra por qué detrás del fenómeno se escondía una necesidad de representación. No solo del amor pasional, sino también del cotidiano.
Con un primer episodio en clave de humor, quizás lo que va seguir echándose en falta es haber visto a las dos heroínas en los años 70, en un momento en el que la visibilidad, especialmente en el caso de las lesbianas, era prácticamente nula No obstante, 2020 sigue sentando muy bien a Luisita y Amelia, que continúan teniendo el mismo carisma y la misma química. Es fascinante cómo Paula Usero y Carol Rovira consiguen transmitir esa sensación de dos mujeres que llevan juntas mucho tiempo, no es sencillo. A falta de conocer más, el primer capítulo de la segunda entrega promete una temporada más divertida, más comprometida y con un universo más amplio, si cabe.
Nota: 7
Lo mejor: Esa química entre Usero y Rovira, que sigue en constante evolución.
Lo peor: Sigue el interrogante de cómo hubiera sido este spin-off ambientado en los 70.
